Ya sabemos que la osteopatía es una disciplina que considera el cuerpo como un sistema integrado y no aborda de forma aislada las áreas que presentan molestias. Hoy vamos a ver la relación fundamental que mantienen el sistema nervioso y el musculoesquelético, siendo la columna vertebral, el eje fundamental de esta conexión. La osteopatía es capaz de restaurar el equilibrio y la alineación adecuada de la columna, lo que puede tener un impacto positivo en la función nerviosa.
La osteopatía no se limita a tratar la estructura física del cuerpo, sino que también se enfoca en su función
Los desequilibrios en el sistema musculoesquelético pueden comprimir los nervios, ocasionando dolor y disfunción. Los tratamientos osteopáticos, que incluyen técnicas de manipulación y movilización, pueden aliviar esta compresión, disminuir la inflamación y restaurar la función nerviosa adecuada.
La osteopatía no se limita a tratar la estructura física del cuerpo, sino que también se enfoca en su función. Los tratamientos osteopáticos logran mejorar la circulación sanguínea y linfática, lo que facilita una mejor distribución de nutrientes y oxígeno a los tejidos nerviosos, además de ayudar en la eliminación de toxinas y desechos metabólicos.
El estrés crónico puede tener efectos perjudiciales en el sistema nervioso, lo que puede desencadenar problemas físicos y mentales. La osteopatía, al aliviar la tensión y fomentar la relajación, puede ser beneficiosa para reducir el estrés y la ansiedad, lo cual, a su vez, puede tener un efecto positivo en el funcionamiento del sistema nervioso.
Nadie mejor que nuestro osteópata, Roberto Abitbol, para explicarnos como la osteopatía se centra en tratar al individuo en su totalidad, teniendo en cuenta no solo los síntomas físicos, sino también los aspectos emocionales y mentales de la salud. Al abordar tanto el sistema musculoesquelético como el sistema nervioso, la osteopatía puede ayudar a promover un mayor bienestar integral. Cierra ya tu cita para las siguientes sesiones de ‘Cuidándote’.
