Las algas son una excelente fuente de minerales como el yodo, el hierro y el calcio, así como de vitaminas como la vitamina C, la K y varias del complejo B. También contienen proteínas, carbohidratos complejos, fibra y ácidos grasos omega-3. Además de su valor nutricional, algunas investigaciones sugieren que ciertas algas tienen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de ciertas enfermedades. También se ha demostrado que algunas algas tienen propiedades antivirales y antimicrobianas.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que no todas las algas son seguras para el consumo humano, ya que pueden contener contaminantes como metales pesados y sustancias tóxicas producidas por las algas llamadas microcistinas. Por lo tanto, es importante comprar algas de fuentes confiables y consumirlas en cantidades moderadas como parte de una dieta equilibrada.
Estos alimentos son poco frecuentes en nuestra gastronomía ya que son difíciles de combinar con los alimentos más habituales de nuestra Dieta Mediterránea. Si te interesa introducir las algas en tu alimentación solo tienes que pedir una sesión para que nuestra nutricionista, Sonia Torres, te asesore sobre las más adecuadas para tu bienestar.
Beneficios de introducir las algas en tu alimentación:
- Aporte de nutrientes: Son ricas en nutrientes, incluyendo vitaminas, minerales y antioxidantes, que ayudan a mantener la salud del cuerpo en general.
- Beneficios para el corazón: Algunas algas contienen ácidos grasos omega-3, que son beneficiosos para la salud cardiovascular al reducir la inflamación y el riesgo de enfermedades del corazón.
- Ayuda en la digestión: Pueden actuar como prebióticos, lo que significa que pueden promover el crecimiento de bacterias beneficiosas en el intestino. Esto hace que mejore la digestión y la absorción de nutrientes.
- Control del azúcar en la sangre: Algunas investigaciones sugieren que ciertas algas pueden ayudar a regular los niveles de azúcar en la sangre y mejorar la sensibilidad a la insulina, lo que puede ayudar a prevenir la diabetes tipo 2.
- Protección contra enfermedades: Estos organismos contienen compuestos bioactivos, como polisacáridos, que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Es importante recordar que las algas pueden ser altas en sodio y yodo y que su consumo puede ser contraproducente si se padecen algunas enfermedades como puede ser el hipotiroidismo. Por este motivo, siempre tienen que tomarse con moderación y en combinación con una dieta equilibrada. También es necesario seleccionar las algas adecuadas y asegurarse de que se hayan cultivado en condiciones seguras y saludables. Pide cita en tu servicio de nutrición de ‘Cuidándote’ y conoce si las algas son para ti.
