Películas como ‘Del Revés’ nos han enseñado que hay recuerdos esenciales que permanecerán siempre en nuestra memoria. No nos queda duda de que una de esas esferas luminosas en las que se almacenan los momentos más importantes de la vida de la protagonista de la película contiene el de sus primeros pasos: una escena icónica de celebración y recuerdos que se atesoran en las familias.

Y es que este hito, igual que otros, marca un momento crucial en el crecimiento de un niño. El cuerpo humano es una máquina perfecta y ser testigo del desarrollo motor en los bebés es una aventura fascinante, llena de pequeños logros que emocionan tanto a los padres como a los profesionales de la salud. Pero ¿nos hemos detenido a pensar en qué pasa si esos hitos no se alcanzan a tiempo? ¿Cuándo debemos preocuparnos y buscar ayuda profesional como el servicio de valoración de fisioterapia pediátrica que ofrece Cuidándote?

El desarrollo motor se refiere a la adquisición de habilidades que permiten a los bebés moverse y controlar su cuerpo. Estos hitos se logran en diferentes etapas y son indicadores esenciales del crecimiento saludable del ser humano.

Hitos del desarrollo motor

Para estar atentos a estos hitos, presentamos los principales de cada etapa y lo que se puede esperar de esta:

  • De 0 a 3 meses: Se presentan reflejos innatos como el de succión, el de búsqueda y prensión. El bebé debe empezar a levantar la cabeza cuando está boca abajo y comenzar a controlar los movimientos que hace con ella. Además, descubre que puede llevarse las manos a la boca y mover sus brazos y piernas de manera activa.
  • De 4 a 6 meses: El bebé es capaz de sostener la cabeza estable sin apoyo y puede girar hacia ambos lados. Además, empieza a sentarse con apoyo y puede mantener determinada posición durante breves períodos. Asimismo, comienza a agarrar objetos con intención y los pasa de una mano a otra.
  • De 7 a 9 meses: Empieza a moverse arrastrándose, gateando o rodando. Logra sentarse sin apoyo y puede pasar de estar acostado a sentado. Veremos también que mejora la capacidad de agarrar y manipular objetos pequeños, debido a que se presenta una coordinación entre ojo y mano.
  • De 10 a 12 meses: El bebé comienza a ponerse de pie con apoyo y puede dar sus primeros pasos sosteniéndose en los muebles. Además, alcanza el control de la mano, puede usar sus dedos para recoger objetos pequeños. Y empieza con la exploración activa: gatea, se pone de pie y camina con ayuda.

No dudes en recurrir al servicio de valoración de fisioterapia pediátrica si notas alguna señal de alerta o si tienes cualquier preocupación sobre el desarrollo motor de tu bebé. Nuestra fisioterapeuta, Sabrina Méndez, puede realizar una evaluación completa para apoyar el desarrollo de tu pequeño.