Sentirse bien en un mundo tan exigente puede ser tan complicado como tratar de entender el último algoritmo de Instagram. La historia nos ha demostrado que los humanos somos increíblemente resilientes, capaces de enfrentar desafíos tan grandes como aprender a usar las nuevas funciones de nuestro smartphone.
Pero, al ser seres sociales por naturaleza, necesitamos nuestra “tribu” en los momentos difíciles. En situaciones complejas, es esencial tener a nuestro alrededor personas que nos proporcionen un espacio seguro, como esos amigos con los que puedes hablar de todo, desde tus miedos hasta tus teorías sobre el último episodio de tu serie favorita.
En el camino hacia el bienestar, tener una red de apoyo robusta puede marcar una gran diferencia en cómo vemos la vida. Al final del día, compartir nuestras experiencias y preocupaciones con otros puede ser tan reconfortante como encontrar el meme perfecto que describe exactamente cómo te sientes.
¿Qué es una red de apoyo?
Se trata de un grupo de personas y recursos que pueden ofrecerte asistencia emocional, práctica o profesional cuando la necesites. Son lazos que se tejen para disponer de ayuda, un consejo y, sobre todo, soporte emocional. Contar con esta red es imprescindible, ya que aporta a tu crecimiento personal y profesional en las diferentes etapas de la vida.
Estos grupos pueden estar compuestos de familiares, amigos, compañeros de trabajo, mentores, e incluso, profesionales de la salud como psicólogos y coaches. Y pueden ofrecer beneficios como el sentido de comunidad, la motivación y el sentido de responsabilidad al tener que estar enfocado en metas. Además, los miembros de una red pueden proporcionar valiosos consejos y diferentes perspectivas de una misma realidad.
Contar con una red refuerza tu confianza y esto alivia el estrés y la ansiedad, que pueden tener un impacto en tu salud física, pues suelen desencadenar enfermedades. En este sentido, Alicia Gómez, nuestra coach de Cuidándote, recuerda la importancia de trabajar en el círculo vicioso que supone el estrés crónico.
¿Cómo construir una red de apoyo efectiva?
- Identifica tus necesidades: Antes de construir tu red, empieza por entender qué es lo que necesitas emocional y socialmente. Así determinarás qué es lo que buscas en este soporte.
- Evalúa tus relaciones y reconoce a los miembros clave: Evalúa a las personas que ya forman parte de tu vida e identifica quiénes están dispuestos a escucharte, esas personas que pueden ofrecerte apoyo de manera incondicional. Recuerda que esta relación debe ser mutua.
- Establece una comunicación abierta y practica la escucha activa: Fomenta una comunicación honesta y abierta con los miembros de la red. Demuestra que valoras lo que te dicen escuchando y entendiendo lo que te comunican. Muéstrate abierto a recibir feedback.
- Busca diversidad en la red: Incluye a personas con diferentes experiencias y conocimientos para obtener una variedad de perspectivas y consejos.
- Participa en comunidades y grupos de interés: Únete a grupos y comunidades relacionadas con el bienestar y la salud, esto te permitirá ampliar tu red de apoyo.
- Fortalece los lazos siendo recíproco y nutriendo las relaciones para mantener la red: Como todo, tu red de soporte necesita mantenimiento. No pierdas el contacto con los miembros de tu grupo. Muéstrate atento a sus necesidades y acompaña también sus procesos.
- Traza límites y respeta los de la red: para tener una relación saludable, necesitas límites. Es indispensable recordarlos y hablar sobre este tema en caso no se estén respetando.
Puedes confiar en el coaching de Cuidándote para guiarte en el proceso de identificación de esas personas maravillosas que pueden sostenerte incluso cuando estás en tu versión más ‘lunes por la mañana’. Reserva tu sesión online o presencial en cuidandote@grupopoliclinica.es.