¿Pasas tantas horas frente a una pantalla que has empezado a sentirte uno de los personajes de la película “Wall-E”, de esos que van desplazándose por la vida en sillas flotantes mientras interactúan únicamente con dispositivos electrónicos? Aunque parece que aún estamos lejos de este escenario tan extremo, la realidad es que nuestra dependencia de las pantallas tiene ya un impacto físico en la postura y en todo nuestro cuerpo.
Para encontrar soluciones, analizamos cómo cada uno de estos dispositivos afecta a la salud de tu espalda. Desde la ‘Escuela de Espalda‘ del programa ‘Cuidándote’, te recordamos que puedes asistir a nuestras sesiones para recibir consejos personalizados de fisioterapeutas y evitar posturas incorrectas al usar pantallas.
- Pantalla de ordenador de escritorio. El uso prolongado de estos ordenadores te invita a encorvarte hacia la pantalla o a mantener el cuello inclinado por largos periodos. Esto tiene un impacto negativo en la zona cervical y lumbar de tu columna, y ocasiona rigidez en los hombros. Se recomienda colocar la pantalla a la altura de los ojos y a 50 o 70 centímetros de distancia para no forzar el cuello ni la vista. Además, en estos casos es idóneo utilizar una silla ergonómica que soporte de manera adecuada la curvatura natural de la espalda. ¡Recuerda incluir descansos activos en tu jornada!
- Las pantallas de los portátiles. Al tener la pantalla y el teclado en una sola pieza, estos ordenadores promueven una postura encorvada. Esto suele agravar el dolor cervical y lumbar, ya que se registra una flexión constante del cuello y de la espalda. En este caso, puedes recurrir a un soporte de portátil para elevar la pantalla al nivel de los ojos, y para mejorar tu postura, completa tu equipo con un teclado y un ratón externo.
- Teléfonos Móviles. Nos pasamos gran parte del día utilizando el móvil, hasta el punto de que se usa el término “text neck” o “cuello de texto” para describir el dolor de cuello y espalda generado por mirar el teléfono móvil durante largos periodos. La inclinación hacia adelante para revisar redes sociales o mensajes ejerce una presión en las vértebras cervicales. Para reducir esa flexión, levanta el teléfono a la altura de los ojos. Además, intenta minimizar el tiempo que pasas de manera continua con el móvil, puedes tomarte descansos para realizar estiramientos. También te ayudará realizar ejercicios para fortalecer los músculos de tu espalda alta.
- Tabletas. ¿Has escuchado hablar del cuello de tablet? Sí, es lo que puede ocasionar el uso de tabletas, pues este dispositivo -de la misma manera que el móvil- te invita a inclinarte hacia adelante para lograr ver la pantalla que generalmente reposa sobre el regazo o una mesa baja. Recomendamos utilizar un soporte, en este caso vertical, y buscar la angulación correcta ajustando la inclinación para que puedas mirar la pantalla sin forzar tu cervical.
Seamos conscientes de cómo la tecnología ha revolucionado nuestra vida y empecemos por aprender a usar los dispositivos ergonómicamente para lograr un impacto positivo en el cuidado y la salud de nuestra espalda. De lo contrario, acabarás como los personajes de la película de ‘Wall-E’.
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